En un esfuerzo por modernizar y potenciar la pequeña minería en Chile, el Gobierno lanzó la Política de Fomento a la Pequeña Minería (PFPM), una iniciativa que busca mejorar la productividad, seguridad y sostenibilidad del sector. El anuncio se realizó en la Asociación Minera de Copiapó (Asomico) y contó con la presencia de la ministra de Minería, Aurora Williams, junto a autoridades locales y representantes de agrupaciones mineras.
La ministra Williams destacó que esta política responde a una deuda histórica con los pequeños mineros, quienes sostienen esta actividad en condiciones muchas veces adversas. Asimismo, enfatizó que la estrategia fue construida con la participación de más de 400 personas de 13 regiones, asegurando que las necesidades del sector sean el eje central de la iniciativa. «Esta política es el resultado de un trabajo en el que participaron los incumbentes de la pequeña minería en nuestro país, un sector de gran relevancia debido a sus implicancias territoriales», señaló.
El enfoque de la PFPM se basa en seis ejes estratégicos, los cuales incluyen el acceso a la propiedad minera, la optimización de la exploración y explotación, el aumento de la productividad mediante la innovación, la mejora en la comercialización, el desarrollo del talento humano y el fortalecimiento de la institucionalidad minera. Estas medidas buscan proyectar el crecimiento del sector y consolidar su presencia en más de 40 comunas del norte de Chile, donde la pequeña minería es un pilar económico fundamental.
Por su parte, el gobernador de Atacama, Miguel Vargas Correa, destacó la importancia de esta política para el desarrollo económico regional. «Esta política entiende la relevancia de este sector como motor de desarrollo. Los países avanzan a través de políticas públicas y grandes acuerdos», afirmó, resaltando la importancia de iniciativas como la Política Nacional del Litio y los acuerdos regionales que impulsan el crecimiento minero con una visión a largo plazo.
El Plan de Acción 2025-2026 de la PFPM contempla medidas concretas para la modernización del sector, incluyendo la capacitación de trabajadores, la atracción de nuevos talentos y la implementación de tecnología para mejorar la eficiencia en los procesos mineros. Además, se fortalecerá la gobernanza del sector para garantizar la correcta ejecución de esta política y su impacto positivo en la pequeña minería.
Con esta estrategia, el Gobierno busca transformar y fortalecer un sector clave para la economía nacional, asegurando su crecimiento sostenible y su contribución al desarrollo local en las regiones mineras del país.